No conozco a nadie que no haya terminado mal..

Llega al aula de Teatro. Hoy, sea quien sea, seria ignorado. Queria tiempo para ella, para pensar.

Empieza a entrar en "su mundo", relajandose.

Ejercicios de voz, para el cuerpo, etc..

Busque a Lily por todos las aulas. Solo me faltaban dos. Entre en la de Teatro, en la de practica.-Lily!.-le dije, al verla.

Empieza a hacer una de las conversaciones con la nada, de Alicia en el país de las maravillas. Interpretaba a la niña.

LA observo, parada en la puerta.

Voltea, sigue en lo suyo.
Ahora hacia la primera parte, una "corona" de flores para el gato. Todo salia de su imaginación y demases.

La miro, preocupada. Se me habia ocurrido una idea. Fui a mi cuarto a buscar un par de cosas.

- Hay que aburrido! - exclama - ¿Como puedo poner atención si ese libro no tiene dibujos? - su voz es dulce, casi tanto como la de la niña
Se acomoda en su "árbol"

Escucha a la nada, la nada que yacia abajo de su árbol.
- En este mundo puede ser, pero en mi mundo - hace una pausa, respira hondo para seguir - Los libros tendrian puros dibujos - dice, cambiando la posición. Más comoda.

Vuelvo al rato, con un libro.-Toma, te lo regalo.-le entrego un libro. Era gordo, y tenia bastantes cuentos, con dibujos y todo.

Entrelaza las mano detras de su nuca, las saca veloz al escuchar a la mujer.
Repite - Tonteria? Tonterias - toma al "gato" - Si yo hiciera mi mundo - lo señala - Toodo seria un disparate - sonrie - Porqué todo seria lo que no es.

Sale de su mundo, la mira. - Qué es? - pregunta, levantandose.

Es un libro. Lo compre para leerselo a Ash y a Wil, pero es un regalo para ti.-le sonrio. Pongo el libro en sus manos.-Comprare otros.

- Es para tus hijos - se sienta, la hace sentarse junto a ella -

Negue.-Piensa que es un regalo de ellos para ti.-le sonrei.-tienes muchos cuentos, y dibujos de ellos.-le explique.

La abraza, en parte para descargarse en parte para agradecerle.

Te quiero!.-susurre, abrazandola.-Ademas, tu tambien eres mi hija.-rei.

Rie, abrazada a ella - Yo también te quiero, mamii.

Hijita de mi corazon.-sonrei.-Bueno, ahora me debes una charla.-seria, pero preocupada.

- Charla sobre qué? - el teatro le habia servido, bastante.

La miro.-Conmigo no actues.-le pedi.-La otra vez te fuiste de la casita del Te.-repeti.

Asiente leve.

¿Por que?.-pregunte.

- Por que no queria ver a la gente de ahí - su mirada era fría.